AVATMA ha elaborado un informe técnico veterinario sobre el padecimiento de los animales en estos espectáculos.
Ambos documentos se han entregado en el Registro General del Ayuntamiento de Zaragoza el lunes 14 de marzo, para instar al Consistorio a que no autorice ningún espectáculo taurino dentro de su término municipal.
Noticia en el periódico Crónica de Aragón.
Soy animalista pero no soy sólo animalista, hay más cuestiones que me importan y mucho. Por eso, por razones económicas, laborales, sociales, educativas, sanitarias, internacionales o éticas mis votos han sido para las nuevas formaciones de confluencia de izquierdas desde que surgieron. Y por motivos animalistas también, por supuesto.
Así que me alegré y mucho cuando por ejemplo Barcelona en Común, En Marea A
Coruña, Ahora Madrid, Compromis o Zaragoza en Común entre otros similares se
alzaron con la victoria en sus diferentes ayuntamientos.
Pero además de ser votante soy un ser pensante y con los sentidos
funcionando. Capaz de leer un programa electoral, capaz de escuchar a los
líderes de los partidos, capaz de reflexionar y de decidir el día de las votaciones
y de no dejar de observar ni de recordar lo leído y escuchado los cuatro años
siguientes, y si algo espero es coherencia con lo prometido. No digo milagros,
digo coherencia.
Yo entiendo que nada es fácil, que para lograr cambios hay que luchar contra
la oposición, contra ciertas instituciones, contra lobbies poderosos y a menudo
contra un buen puñado de ciudadanos, pero el que se mete en política sabe dónde
lo está haciendo y conoce de antemano esas dificultades, así como que aquellos
que confiaron en él van a estar muy pendientes de su gestión porque por muy
bonito que sea el envoltorio todos, todos, compramos lo que hay dentro.
Y voy concretando: esto se trata en esta ocasión de espectáculos taurinos y
de ZEC pero antes quiero plantear una situación:
El PSOE no destaca por la Protección Animal en su Programa pero vamos a
suponer que después de la presión social y negociaciones con ese partido se
consigue que pongan fin al Toro de la Vega. Sin duda habría muchos que se
alegrarían pero se sentirían defraudados si en Tordesillas se acaba con el Toro
Alanceado pero se mantienen las corridas de toros, esas que ninguno queremos en
ningún lugar.
Comprendo que en una situación así y con una formación política, repito,
que no lleva nada de eso en su programa, se nos pudiese responder: “hemos conseguido esto pero hay que tener
paciencia, poco a poco, en vez de criticar a los socialistas vamos a
agradecérselo y a mantener un buen feeling con ellos para tener opciones de que
algún día pongan fin también a las corridas en Tordesillas”. Completamente
de acuerdo pero la pregunta es: ¿esa paciencia estaría igualmente justificada
si el PSOE llevase en su programa un punto donde dijese que si gobernaban en
esa Ciudad no consentirían dentro de sus competencias ni el Toro de la Vega, ni
las corridas de toros, ni espectáculo alguno que implicase maltrato animal? Y
las competencias puede que no incluyan prohibirlo pero si decidir partidas
económicas municipales cero para cualquiera de ellos así como no ceder espacios
públicos para su celebración y exigir los requisitos que la ley determine.
Quiero, entonces, que quede muy clara la distinción entre un partido
político que no lleva nada de eso en su programa y con el que se habla y
colabora para ir consiguiendo resultados, y otro al que se le demanda el
cumplimiento de lo que prometió en campaña porque sí lo lleva y que eso hizo
que muchas personas se decidieran a votarle. O sea, cumplimiento de contrato,
como a ti y a mí se nos exige cuando vamos a trabajar o firmamos lo que sea con
el banco.
A continuación transcribo puntos relativos a la Protección Animal que
figuran en el Programa de ZEC:
Rechazar los espectáculos que atenten contra los derechos de los animales.
1.3.1. Oposición al uso de recursos públicos y subvenciones a actividades
lúdicas, espectáculos, festejos, pruebas deportivas o recreativas y concursos
incompatibles con el bienestar animal. Incluida la tauromaquia, los paseos o
desfiles con animales (camellos, burros, ocas…) o la cetrería.
1.3.2. Modificar la Ordenanza Municipal para lograr la prohibición de todas
las actividades anteriormente mencionadas que sean de competencia municipal y,
por lo tanto, no estén amparadas en un ámbito legislativo superior.
Y en un apartado del Código Ético que todos los representantes de ZEC han
de refrendar dice lo siguiente:
Defender la Declaración de los Derechos de los Animales.
Antes dije que soy un votante que observa y por eso sé que ZEC en el tiempo
que lleva gobernando el Ayuntamiento de Zaragoza ya ha conseguido poner fin a
los burritos en El Pilar, a los animales en desfiles y al toro ensogado o
embolado en los festejos de los barrios
rurales (o no destinarle ni un solo recurso municipal), al igual que está
trabajando de forma decidida en destinar 50.000 euros a la esterilización de
perros y gatos o a terminar con asentamiento de circos con animales en la
ciudad. Enhorabuena y gracias, de
corazón. Toda mi admiración porque con vuestra llegada y como parte de vuestras
promesas electorales respecto a los animales habéis logrado avances
fundamentales que hace unos meses eran impensables, pero como lo cortés no
quita lo valiente esta gratitud no puede silenciar mis decepciones y las
expongo.
Noticia en eldiario.es el 21 de junio de 2015:
“A partir de 2016,
el Ayuntamiento de Zaragoza no incluirá dentro de las subvenciones
para comisiones de festejos ninguna partida para llevar a cabo actividades que
conlleven maltrato animal, como el toro de soga, ensogado,
embolado o de fuego. La concejala delegada de Participación, Transparencia y
Gobierno Abierto, Elena Giner, se lo comunicó ayer a los alcaldes de los
14 barrios rurales de la ciudad.
La última subvención
concedida para las fiestas de los barrios rurales fue de 47.766 euros. Desde el
Consistorio de la capital aragonesa apuntan que el importe de la próxima
partida será muy similar, pero, en ningún caso, se podrá destinar nada a este
tipo de festejos. Los distritos deberán justificar, con facturas, en qué han
invertido el dinero concedido”.
Pero se añade:
“Sí se seguirán apoyando las llamadas vaquillas, aunque en el
Consistorio estarán vigilantes para impedir cualquier trato vejatorio a los
animales·.
El Periódico de Aragón publicaba el 13 de febrero de este año:
“El Gobierno de Zaragoza
en Común (ZeC) acordó ayer la prohibición de festejos taurinos "que
comportan un maltrato animal", como el toro de soga, el toro ensogado, el
embolado, el toro de fuego u otras variantes semejantes, en las calles de los
barrios rurales donde el consistorio organiza estos actos.
La decisión apunta que
"no se autorizará la utilización u ocupación del dominio público o del
patrimonio municipal, ni se pondrá a disposición de los organizadores medios
municipales para su realización…
Del mismo modo, el
Ayuntamiento de Zaragoza tampoco organizará ni participará con financiación la
celebración de cualquier acto "que comporte un maltrato animal".
Pero se añade:
Por otro lado, el
acuerdo de Gobierno adoptado ayer sí que permitirá festejos como encierros
tradicionales de reses bravas, suelta de reses o toreo de vaquilla. Estos están
clasificados en el decreto 226/2001, de 18 de septiembre,
del Gobierno de Aragón por el que se aprueba el reglamento de los festejos
taurinos populares. Pese a todo, el consistorio estará vigilante para impedir
cualquier trato vejatorio a los animales en estos supuestos.
A la vista de todo esto me surgen dudas que nacen de no comprender por qué
algo sí se puede y algo no se puede si todo forma parte de lo mismo tanto en
entorno legal como en consecuencias físicas para los animales y éticas para los
ciudadanos. Dudas que se transforman en preguntas porque necesito comprender
qué está ocurriendo, cuál es el impedimento que existe con las vaquillas y que
parece que no es tal con los toros ensogados.
Si es por una cuestión competencial unos y otras están clasificados en un
mismo decreto del Gobierno de Aragón, El 226/2001 del 18 de septiembre.
¿Entonces?
Todos ellos habrán de celebrarse en ese espacio de dominio público o
patrimonio municipal cuya ocupación no se autorizará en el caso de ensogados o
embolados. ¿En de las vaquillas o encierros sí?
Si la imposibilidad para trasladar esas decisiones con los toros a las
vaquillas o encierros es de índole legal, ¿cómo hace ya siete meses sabían que
esas sí los iban a autorizar?
Y si no es una cuestión legal, ¿Por qué las vaquillas y encierros no cuando
también atenta contra los derechos del animal y les causa sufrimiento o supone
trato vejatorio y eso es algo que según su programa no pensaban tolerar?
En los espectáculos con vaquillas o encierros, ¿quién correrá con los
gastos de ambulancia, póliza del seguro de accidentes y de responsabilidad
civil, contrato de un profesional taurino para auxiliar a los que participen en
el festejo y efectivos de seguridad ciudadana?
Por si todavía hubiese alguna duda acerca de cuál es el sufrimiento al que
están sometidos esos animales durante los espectáculos que ZEC si permitirá, se presenta un informe
técnico elaborado por AVATMA (Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la
Tauromaquia y del Maltrato Animal).
Insisto porque quiero que esto quede claro: profeso una gratitud y
admiración muy profundas para ZEC por todo lo que ya han conseguido en materia
de protección animal, por su esfuerzo en seguir avanzando, como muchos
ciudadanos ofrezco cualquier colaboración a mi alcance y no albergo ninguna
duda de que realmente su deseo es hacer cada día más al respecto, pero en este
caso y porque esa fue la promesa electoral que realizaron y la que escribieron
en su programa, la razón principal de no pocas personas para votarles y porque
los argumentos empleados para que no haya toro ensogado o embolado entiendo que
son extrapolables a las vaquillas o encierros, planteo esta cuestión,
admitiendo que puedo estar en lo cierto o en un error pero creo que ejerzo un
derecho y un deber moral al exponerlo, y confío por eso en obtener una
respuesta por parte de quienes detentan las responsabilidades en este asunto,
un grupo de gobierno que como explica ZEC es un proyecto y un proceso
horizontal desde abajo, democrático, colectivo y participativo.
Esta es, en cualquier caso, la reflexión constructiva de quien ha votado y
tiene la intención de seguir votando en municipales, autonómicas y nacionales a
estas nuevas formaciones con olor a 15M, por muchas razones, puesto que han
demostrado que si se quiere y se cuenta con representación se puede. Hacen
falta las dos condiciones y en su caso se dan.